La adolescencia trae consigo la pubertad, los cambios físicos, un cambio en la capacidad de pensamiento y todos los cambios sociales y emocionales que ocurren durante este período de la vida. Esta etapa comienza aproximadamente a los 9 años y sigue hasta que la joven llega a la edad adulta.
En la negociación de prácticas de sexo seguro, se ha encontrado que muchas veces la mujer no participa en las decisiones de cómo, cuándo y de qué modo se llevará a cabo la relación sexual ni cómo prevenirse.
La mayoría de las adolescentes no planea embarazarse, pero muchas lo hacen. Los embarazos en la adolescencia tienen riesgos adicionales de salud tanto para la madre como para el bebé.
La planificación familiar es un pilar fundamental del programa de salud reproductiva y que a través de la información, educación, comunicación, atención y la disponibilidad y variedad de métodos anticonceptivos, constituye en conjunto una de las variables principales para la tasa global de fecundidad.